XXXIII Carta al destino. Roma (Italia), 19 de junio, 2019
Estimado Señor Eddie,
Le escribo desde las alturas, en concreto a 10.000 metros del suelo, me encuentro en el avión de regreso a España desde Roma, surcando el Mediterráneo desde el cielo.
¿Qué tal está? Hace ya mucho tiempo que tenía pensado escribirle, pero un día por otro... En el fondo, sabía cuando estaba haciendo la maleta, que debía llevarme su cuaderno para escribirle esta carta, son esas cosas que uno siente cuando es el momento de hacer algo.
Ya he pasado la barrera del cuarto de siglo, los 25, y la verdad que de momento está siendo un periodo buenísimo, en general el 2019 lo está siendo. Hace ya algunas semanas, viaje también a Bruselas, pues la embajada de España en el Reino de Bélgica, ha mantenido hasta hace apenas unos días, una exposición de un proyecto multiartistico en el que he participado como ilustrador de "10WORDS".
Fue un viaje genial, con amigos; 4 jóvenes con ansias de impregnarnos de cultura, arte, diseño, aventuras y vivencias, propias también de nuestra edad, un viaje de esos con 1000 anécdotas que contar...
Es increíble, lo insignificantes que se ven las nubes desde el suelo, y como impresiona mirarlas desde arriba, es como cuando se miran los campos de trigo subido en el tractor, y las brisas de aire parecen adjudicarles oleaje; pero las nubes son más bellas incluso, esponjosas, destacando unas sobre otras, pero al conjunto crean una única base, con el horizonte allá donde el sol las comienza a cubrir en tonos rosa y carmesí claro.
Roma, llegó como regalo de cumpleaños, tan ansiado viaje desde hace tiempo, y tan inesperado a la vez, ¡Qué maravilla! No podría decirle que me ha impresionado más: Su leyenda, sus calles empedradas, la majestuosidad del Coliseo visto desde la Vía Labicana, la elegancia de la fontana Di Trevi con sus caballos congelados en la historia, la grandeza del panteón de Agripa cuando te sitúas bajo el óculo pómez al descubierto, la inmensidad de la plaza Navona abarrotada de turistas boquiabiertos, la brisa nocturna sobre el río Tíber en el Ponte Garibaldi contemplando a lo lejos la cúpula de la Basílica de San Pedro iluminada por la Luna llena...
Artistas: Miguel Ángel, Bernini, Caravaggio, Rafael.
Gastronomía: Pasta, pizza, tiramisú, y café.
Olores: Albahaca, flores, incienso y velas.
Misterio, historia, locuras, pasión y tradición.
A España, vuelvo rico, cualquiera viaje es positivo, pero este ha sido incluso mejor que eso, he conocido amistades nuevas, personas de muchos lugares del mundo, he paseado por las calles en las que emperadores y mercaderes lo hicieron, y en las retinas retengo cada grabado de las columnas del foro, por siempre.
Estimado Sr Eddie, una vez estamos descendiendo, y viendo a Mallorca o alguna de las islas a lo lejos, apresuro a despedirme mientras se me taponan los oídos por la presión. Encomiendo así mis humildes palabras a las hijas Vestales para que de una forma u otra se las hagan levar a la puerta de su morada. ¡Ciao Roma!
Mis más cordiales saludos,
Manuel Candel
Le escribo desde las alturas, en concreto a 10.000 metros del suelo, me encuentro en el avión de regreso a España desde Roma, surcando el Mediterráneo desde el cielo.
¿Qué tal está? Hace ya mucho tiempo que tenía pensado escribirle, pero un día por otro... En el fondo, sabía cuando estaba haciendo la maleta, que debía llevarme su cuaderno para escribirle esta carta, son esas cosas que uno siente cuando es el momento de hacer algo.
Ya he pasado la barrera del cuarto de siglo, los 25, y la verdad que de momento está siendo un periodo buenísimo, en general el 2019 lo está siendo. Hace ya algunas semanas, viaje también a Bruselas, pues la embajada de España en el Reino de Bélgica, ha mantenido hasta hace apenas unos días, una exposición de un proyecto multiartistico en el que he participado como ilustrador de "10WORDS".
Fue un viaje genial, con amigos; 4 jóvenes con ansias de impregnarnos de cultura, arte, diseño, aventuras y vivencias, propias también de nuestra edad, un viaje de esos con 1000 anécdotas que contar...
Es increíble, lo insignificantes que se ven las nubes desde el suelo, y como impresiona mirarlas desde arriba, es como cuando se miran los campos de trigo subido en el tractor, y las brisas de aire parecen adjudicarles oleaje; pero las nubes son más bellas incluso, esponjosas, destacando unas sobre otras, pero al conjunto crean una única base, con el horizonte allá donde el sol las comienza a cubrir en tonos rosa y carmesí claro.
Roma, llegó como regalo de cumpleaños, tan ansiado viaje desde hace tiempo, y tan inesperado a la vez, ¡Qué maravilla! No podría decirle que me ha impresionado más: Su leyenda, sus calles empedradas, la majestuosidad del Coliseo visto desde la Vía Labicana, la elegancia de la fontana Di Trevi con sus caballos congelados en la historia, la grandeza del panteón de Agripa cuando te sitúas bajo el óculo pómez al descubierto, la inmensidad de la plaza Navona abarrotada de turistas boquiabiertos, la brisa nocturna sobre el río Tíber en el Ponte Garibaldi contemplando a lo lejos la cúpula de la Basílica de San Pedro iluminada por la Luna llena...
Artistas: Miguel Ángel, Bernini, Caravaggio, Rafael.
Gastronomía: Pasta, pizza, tiramisú, y café.
Olores: Albahaca, flores, incienso y velas.
Misterio, historia, locuras, pasión y tradición.
A España, vuelvo rico, cualquiera viaje es positivo, pero este ha sido incluso mejor que eso, he conocido amistades nuevas, personas de muchos lugares del mundo, he paseado por las calles en las que emperadores y mercaderes lo hicieron, y en las retinas retengo cada grabado de las columnas del foro, por siempre.
Estimado Sr Eddie, una vez estamos descendiendo, y viendo a Mallorca o alguna de las islas a lo lejos, apresuro a despedirme mientras se me taponan los oídos por la presión. Encomiendo así mis humildes palabras a las hijas Vestales para que de una forma u otra se las hagan levar a la puerta de su morada. ¡Ciao Roma!
Mis más cordiales saludos,
Manuel Candel
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